Efecto del áloe vera en el sistema inmune - segunda parte

19.06.2023

Para revertir los procesos perjudiciales desencadenados por la mala digestión se necesita un tratamiento multidimensional. En este tratamiento, el áloe vera puede jugar un papel clave. El acemanano presente en el áloe vera tiene la capacidad de normalizar los procesos dañinos y contribuir a la mejora de la función del sistema inmune:

  • A nivel intestinal actúa como un potente anti-inflamatorio, neutralizando muchas de las enzimas responsables de dañar la pared mucosa y logrando una disminución de la permeabilidad de dicha pared lo que dificulta la absorción de sustancias proteicas extrañas;

  • Tiene propiedades virucidas, bactericidas y fungicidas que controlan el crecimiento excesivo de Candida, permitiendo que la flora bacteriana benéfica se restaure; y

  • Estimula la movilidad intestinal ayudando a mover más rápido las proteínas alergénicas del intestino hacia el colon.

Todos estos procesos contribuyen a normalizar la estructura de la pared intestinal y su función, deteniendo el círculo vicioso del deterioro del sistema inmunológico.

También, en estudios de laboratorio se ha demostrado que el acemanano:

  • Tiene efectos directos sobre las células del sistema inmune, activando y estimulando los benéficos macrófagos, monocitos, anticuerpos y células T;

  • Actúa como un puente entre las proteínas extrañas (tales como partículas de virus) y los macrófagos, facilitando la fagocitosis (ingestión de estas partículas por el macrófago). Esta activación del sitio receptor es un componente clave en el impulso de la inmunidad celular, (que es particularmente deficiente en la infección por VIH);

  • Aumenta el número de anticuerpos que forman las células B en el bazo; y

  • Protege la médula ósea de los daños causados por productos químicos tóxicos y medicamentos como el AZT.

Estos diversos efectos, aparentemente complejos, generalizados y no relacionados, en realidad son debido a un proceso simple que se da a nivel de la membrana celular. El acemanano, un mucopolisacárido, es un azúcar de cadena larga que actúa en el interior de las membranas celulares aumentando la fluidez y permeabilidad de la misma permitiendo a las toxinas salir de la célula y los nutrientes entrar en la misma. Esto resulta en una mejora del metabolismo celular y un aumento general en la producción de energía.

El círculo vicioso de la mala digestión, con la consiguiente deficiencia en la nutrición celular, se acaba cuando el acemanano normaliza la absorción de nutrientes y aumenta la tolerancia a los perjudiciales compuestos alergénicos.

En el siglo XXI, los sistemas metabólicos y de desintoxicación de las personas están bajo creciente estrés por el aumento de ingestión de sustancias químicas extrañas, alimentos deficientes de nutrientes y el sistema inmune sobrecargado de agentes infecciosos dañinos.

Debido a la presencia del acemanano en el gel de áloe vera, es recomendable incluirlo en el tratamiento de trastornos de la deficiencia inmune. Desempeñará un papel destacado, en conjunto con otras terapias, en el tratamiento multidimensional de estas enfermedades. Los poderes curativos del áloe se conocen desde hace siglos, pero ahora existe el fundamento científico que permite ver su importancia en el restablecimiento y el mantenimiento de nuestra salud.